Visto en autocasion
Toyota ha encargado a Yamaha la fabricación de un motor V8 alimentado por hidrógeno que podría alcanzar los 450 CV de potencia.
Toyota no quiere decir adiós del todo a los motores de combustión y prueba de ello es el encargo que ha realizado a Yamaha Motor: el desarrollo de un propulsor alimentado por hidrógeno.
Yamaha ha desvelado que el motor V8 de 5,0 litros de capacidad se desarrollaría para automóviles y se basaría en el utilizado por el coupé Lexus RC F, con alteraciones en sus culatas e inyectores, entre otros elementos.
Según los primeros cálculos de Yamaha, esta mecánica será capaz de entregar hasta 450 CV de potencia a 6.800 revoluciones por minuto y es que este desarrollo no es algo nuevo, pues la compañía nipona lleva unos cinco años trabajando en un motor de hidrógeno para automóviles.
450 CV y neutro en carbono
«Los motores de hidrógeno albergan el potencial de ser neutros en carbono y, al mismo tiempo, mantienen viva nuestra pasión por el motor de combustión interna», ha explicado Yoshihiro Hidaka, presidente de Yamaha Motor, que ha asegurado que su compañía aspira a lograr la neutralidad de las emisiones de carbono para el año 2050.
La idea de alimentar un motor con hidrógeno no es nueva. Toyota ya ha desarrollado un GR Yaris “experimental” que tiene un motor de combustión interna de 1,6 litros y utiliza hidrógeno como combustible.
El lado oscuro del coche eléctrico en Japón: se pueden perder 5,5 millones de empleos
No es la primera vez que Yamaha y Toyota colaboran en proyectos conjuntos. Recordemos que fruto de su trabajo conjunto se creó el estratosférico V10 de 4,8 litros del superdeportivo Lexus LFA, un motor con 560 CV de potencia y 480 Nm de par que pasará a la historia como uno de los mejores de todos los tiempos.
Marcas como BMW también han hecho sus pinitos con vehículos de combustión que usan el hidrógeno como combustible. Ejemplo de ello fue el BMW Hydrogen 7, que lanzó en 2006 con una producción muy limitada y que, como novedad, permitía también el uso de gasolina convencional.